viernes, 16 de enero de 2009

Credo

Creo en el amor (soy un idiota romántico) y en la carcajada de la inocencia, en el mágico poder curativo de la risa.
Creo en el valemadrismo como medio de vida de los privilegiados, que la riqueza no se mide en bienes, ni en poder, ni en años.
Creo en mí tanto como en todo lo que me lastima, y lo que me levanta que me tiende a mirar más allá, más adentro.
Creo en la fantasía y en el mundo de los cuentos, aunque la realidad prefiera no contarlos, aunque la madurez progresista considere óptimo olvidarlos.
Creo en las palabras de los libros quemados cuyas cenizas carga el viento en susurros.
Creo en el atractivo descomunal por descubrir un secreto y en el impasible afán por inventarlos. Creo en las consecuencias como obra de las causas y en su interminable red de efectos.
Creo en los pasos que acompasan mis latidos y en la mirada imperante de quien aterriza y se apropia de mi corazón.
Creo en el amor y en su confusión por los restos que quedan. Melancólica tristeza en música suave y chillante.
Creo en las pautas y en las señales, en la majestuosidad de las mujeres y sus deliciosas curvas.
Creo en el olvido y en sus lagunas espirales donde se pierden los recuerdos para quedar rezagados en una vieja montaña de memoria.
Creo que mucho de lo que creo puede dejar de ser creencia mañana, y que mañana creeré en cosas nuevas.
Creo que los nuncas no son para siempre, sino fuertes arranques de ocasión.

1 comentario:

LizAurora dijo...

es la primera vez que uso esto jajajajaja

eeeeeriiiiiickkkkk! esta bien padreeee! lo que escribiste...

a mi se me hace ue el erick que nos decia "LOS ODIO A TODOS" no es tan malo comoquiere que lo vena...


saludos