Buenas, buenas. Las que sean, pero que sean buenas de preferencia, si no lo son, ps ni modo, muy bronca suya.
La banda ya se va formando, aunque aún no se forma nada, igual y apenas es la idea. Les voy a contar lo que llevo.
Una amiga me conectó con un amigo suyo que toca la guitarra. Todo es bueno, me supuse, cualquier músico puede aportar, nomás que este cuate dijo que él tocaba metal y que quien sabe si pudiera hacer algo con la banda uniforme de música experimental que se cocina en mi cabeza. ¿Ps qué pasó, mano? El que quiere tocar, toca. La actitud rocanrolera, melancólica, pachanguera, ida y desmadrosa cuenta mucho. Por eso he decidido no llamarle a este tal sujeto hasta que ya tengamos algo bien formado.
Al Malamen ya lo conocen. Él por supuesto que está invitado. Alguna vez enfiló con Fausto donde tuvieron, tuvimos (aunque yo no tocaba instrumento), buenos momentos. También formó parte de mis varios fracasos y varios nombres de bandas que nunca llegarían a conocer el calor de un escenario.
Yo lo invité como bajista, pero el César dijo que el Malamen es guitarrista. Bueno, ps que la haga de las dos.
El Pioser, el ser que pía. Lo cité en un tributo a Pink Floyd, donde varios músicos locales se aventaron el Dark Side of the Moon en el Ágoras. Platicamos, lo vi entusiasmado, ávido y disponible de tiempo. Hasta me dijo que uno de estos días debería (yo) de ir a su casa para escuchar algo del material que estaba formando. Dijo algo así como que sonaba como una patada en las bolas para alguien que hubiera estudiado armonía, pero que a él le gustaba... eso me interesó.
El Pioser es como que el músico de escuela. El que le sabe a las armonías y a las escalas y cosas de esas. Que los sonidos asonantes que los disonantes que el bla bla bla. Pero se le ve que trae ganas.
El René que siempre trae ganas. Ya tuvo un bajo, tuvo violín, se compró una armónica y ahora anda con el guiro. Canta y hace ruidos... dice que algún día se comprará una batería. Tiene, ganas, el wey siempre tiene ganas.
El Pinky (esperemos que Floydinsky), contacto de René. Será, en dado caso que sea, el baterista. Según René, el Pinky está disponible la mayoría del tiempo, tiene un taller de madera o algo así donde tiene sus bocinas, la batería y mezcladoras, ideal lugar para ensayar.
Hay otro wey a quien no conozco. También me lo contactó una amiga. Me dijo que era ingenioso, creativo y que cantaba. Anda buscando banda. Le interesó cuando le dije que quisiera que una de las más grandes influencias de la banda fuera Pink Floyd.
Tan pronto acabe con todo el tedioso trámite de sacar una carrera y tener un título de licenciado, iremos con el Pinky. Iré a visitar al Pioser y haré pa que nos juntemos todos, instrumentos en mano, pa ver qué sale.
jueves, 4 de diciembre de 2008
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario